Pensemos entonces en eso,¿realmente somos cristianos que irradiamos la presencia de Cristo? o somos esos cristianos que sólo nos llamamos así para sentirnos orgullosos.Que el Señor Jesús nos irradia nos transparente en esta vida humana esta experiencia de alegría, de gozo y sobre todo, como San Bernabé la experiencia del Espíritu Santo en nosotros.Que Dios nos acompañe siempre, así sea.