Amado Padre, te pedimos que viva en nosotros siempre Tú Espíritu. Y que sea Tú Espíritu quien nos mueva a escoger siempre lo correcto, lo que te agrade. Ayúdanos en esta Cuaresma a caminar junto a Ti; a reconocerte en nuestros hermanos, a desear cambiar nuestras miserias por Tú luz. Amén.